Los radares están convirtiendo algunas carreteras europeas en verdaderos campos de minas y por fin una administración ha decidido levantar la mano ante el acoso al que se ven sometidos los conductores. No por el hecho de que existan radares, que lógicamente están para sancionar los excesos de velocidad que en ningún caso deben consentirse (se calcula que la velocidad inadecuada está presente en hasta el 21% de los accidentes de tráfico mortales), sino por su elevado número y, sobre todo, por las técnicas utilizadas en los nuevos controles de velocidad, únicamente encaminadas a pillar al infractor de manera oculta pero sin ningún tipo de labor de concienciación.
Italia, el país con más densidad de radares
Todo hay que decir, eso sí, que tampoco es casualidad que Italia sea el primer país europeo que decida poner fin a esta política de recaudación de dinero a través de los controles de velocidad. Y es que, según el último Observatorio de Radares de Coyote, mientras los españoles nos cruzamos de media con 87 radares fijos al mes y en Francia con 81, en Italia sus conductores se someten a la vigilancia de hasta 155 radares, 4 veces más que en nuestro país. Pero todo tiene un límite.

Con 11.248 radares repartidos por todas sus carreteras y hasta 1.700 millones de euros recaudados al año en multas, Italia dice ya basta. Así lo ha comunicado el propio ministro de Transportes del país transalpino, Matteo Salvini, quien acaba de anunciar una nueva ley para poner fin al uso de radares “solo para recaudar dinero y acosar a los ciudadanos”. La normativa ya ha entrado en vigor y hay un año de plazo para que se adapte por todo el país. Pero, ¿qué supondrá en la práctica?
El país prohibirá instalar radares camuflados y a bajos límites
Muy aplaudida por las asociaciones y clubes de automovilistas, la nueva ley prohibirá para empezar en Italia la instalación de radares camuflados en las carreteras. Todos tendrán ya que señalizarse y anunciarse obligatoriamente, tanto fijos como móviles, lo que supondrá el fin de la táctica de ocultar y esconder radares. El aviso, además, deberá realizarse con al menos 1 kilómetro de distancia y mediante una señalización completamente visible. Pero hay más medidas y muy importantes.
Otra gran novedad supondrá que, en Italia, también se prohibirán las localizaciones de radares en tramos donde haya una considerable reducción de velocidad respecto al límite genérico del tipo de vía. Esta reducción se establece en un máximo de 20 km/h, por lo que, para entendernos, no podrán colocarse radares en tramos con límites menores a 100 km/h si la vía tiene un límite habitual de 120 km/h (por ejemplo, en autovías o autopistas), mientras que en carreteras convencionales con límites de 100 km/h no podrán activarse radares en tramos que reduzcan la velocidad por debajo de 80 km/h.

Por último, el Ministerio de Transportes de Italia ha confirmado que también vetará la colocación de radares mediante técnicas denominadas de cascada, con varios aparatos seguidos, prohibiendo ya colocar radares si hay otro en un tramo de menos de 4 kilómetros en autopistas. En las vías interurbanas no podrán situarse dos radares a menos de 3 kilómetros de distancia, mientras que en ciudad no podrán situarse a menos de 500 metros unos de otros.
En España aumenta el número de radares
¿Y en España? ¿Qué política está siguiendo en el último año la DGT? Partiendo de la base de que nuestra densidad de radares es mucho menor que la de Italia, lo mismo que una recaudación en multas de velocidad que supera por poco los 500 millones de euros, cuando en Italia hemos dicho que alcanza los 1.700 millones, la realidad es que nuestro país sigue apostando de momento por el incremento de radares.
Según el último Observatorio de Radares de Coyote, durante el último año se han instalado en España hasta 454 radares más, lo que supone un aumento del 15,44% respecto al ejercicio anterior. La cifra, aun así, se sitúa hoy en los 3.395 radares totales, contando todas las comunidades autónomas y ayuntamientos, por los 11.248 radares que hay en Italia, lo que demuestra que nuestro país está todavía lejos del nivel de persecución de la velocidad que ha mantenido Italia durante años.

Cataluña, la comunidad con más radares
Los datos reflejan también que hasta el 47% de los radares de España se encuentran hoy en ciudad, mientras que un 34% están en carreteras secundarias y un 18,23% en autovías y autopistas. Cataluña, que tiene transferidas las competencias de tráfico, se sitúa hoy como la comunidad autónoma con más radares de España, con 902, seguida de Andalucía (450), Castilla y León (356) y Madrid (252).
Las 10 Comunidades Autónomas con más radares de España
- Cataluña (902)
- Andalucía (450)
- Castilla y León (356)
- Madrid (252)
- País Vasco (248)
- Galicia (213)
- Comunidad Valenciana (206)
- Castilla la Mancha (144)
- Aragón (113)
- Asturias (111)

Las 10 provincias con mayor número de radares
- Barcelona
- Madrid
- Girona
- Asturias
- Alicante
- Cádiz
- Baleares
- Málaga
- Bizkaia
- Gipuzkoa